dia de los padres cuentoA pesar de que ya no estás conmigo guardo hermosos recuerdos del ayer cuando los dos caminábamos juntos.

Me contabas de tus viajes, por el mundo, trabajando en veleros como timonel conociendo muchos lugares y culturas de otros países.

Tenía como 7 años cuando tú me llevaste al rio santa para enseñarme a nadar y a hablarme sobre el rio. Recuerdo que me decías;

En este rio hijo, vas a tener una experiencia inolvidable. A veces hay bruma y nos sentimos caminando entre las nubes y las estrellas. Sus caudalosas aguas dan vida. El rio es misterioso como todos los ríos del mundo y en el caudal de sus aguas hay vida. En sus aguas hay truchas y variedad de peces. Cuando colecta las gotas de lluvia, se siente bello y majestoso. En la orilla hay muchas flores silvestres y hermosos pinos, algarrobo y espinosos cactus. Estas aguas van regando plantaciones y a su vez enriqueciendo la flora y la fauna del planeta –

Durante mis vacaciones, me llevabas a unas minas en donde trabajabas como supervisor. Llegamos hasta una rústica casita donde cansados por el viaje de 8 horas, nos quedamos dormidos. Continuando el viaje, al día siguiente, a caballo por las montañas pude ver a un majestuoso cóndor. Después tú me dijiste que el cóndor no ataca a los humanos pero pronto veras a las vizcachas, (conejos de la montaña) chinchillas y muchos colibrís, llegamos a colquipocro a las 8 de la noche.

Al día siguiente vi a muchos indios trabajando descalzos y algunos con sandalias de cuero de llamas, mascando hojas de coca. Niños llorando y sin zapatos. Mujeres en sus chozas cocinando papas azadas. Al verme me ofrecieron papas, cancha y mazorcas de maíz hervidas y quinua. Almorcé con ellas y agradecí esta humilde invitación. Al ver a los capataces cometiendo abusos con estos indios y con sus familiares. Vi tanta pobreza y trato cruel que empecé a llorar. Cuando me vistes llorando me dijiste que a ti te paso lo mismo cuando viniste por primera vez, pero esto va a cambiar porque ya di el informe en la corte de lima.

Dos años más tarde me llamaste; – Eduardito, tengo un nuevo trabajo. Vas a cumplir 14 años y voy a necesitar que me ayudes. –

– ¿Cuál es ese trabajo papa? – te pregunte.

Me miraste con una sonrisa en tu rostro. Me dijiste que el departamento de educación te había contratado para llevar pupitres, sillas, libros y uniformes para las nuevas escuelas en lugares inhóspitos de la Cordillera de los Andes.

Estos materiales escolares llegarían a Caraz pero yo alquilare mulas para llevarlo hasta lugares como los que conociste en las minas donde yo trabajaba. Muchos profesores de educación primaria irán a estos sitios para educar a estos niños de estos lugares lejanos. Van a aprender a leer y así van a tener mejores oportunidades en nuestra sociedad actual.

Al escuchar estas palabras de mi padre yo me sentí muy contento de saber que habría un nuevo trato para estos niños pobres.

Me sentí muy orgulloso de tener un padre como el que Dios me dio. Me acerque a él y lo abrace con mucha fuerza y le dije: – en mis vacaciones yo caminare a tu lado con alegría y espero entregarle a esos niños estos libros. –

En este día de los padres quiero agradecerte por haberme dado mucho amor y buenos principios con valores culturales.

Para aquella época el presidente del Perú era el señor Manuel Prado Ugarteche. Al tener información del censo de 1940 y conocer del alto volumen de la población del país de analfabetización, firmo la ley orgánica de educación pública en 1943 y emprendió un agresivo plan de alfabetización a nivel nacional. Estados unidos apoyo esta ley enviando mejores equipos técnicos y variedad

A Mi Hijo Shariff en el Día de los Padres

Tu eres el primero de nuestros 3 hijos que a Gladys y a mi dios nos obsequió. En este día escribo estas palabras que con mucho orgullo salen de mi corazón.

Como hijo, eres admirable.

Como amigo, eres leal, sincero y franco.

Como líder, naciste para eso.

Como estudiante, eres perseverante.

Como padre, eres magnifico.

Como familia, eres el rey del buen humor, nos haces reír cuando en forma elegante chistosa al conversar y así nos ayudas a ser más llevadero los momentos difíciles de la vida.

Gracias hijo, feliz día y que dios te bendiga

Tu padre Eduardo